¿Por qué quieres ser DJ?

¿Qué es lo que realmente te llama más la atención cuando te planteas ser discjockey? ¿Realmente amas la música más que otra cosa? ¿O el propósito real es alcanzar la fama a cualquier precio? Es una pregunta retórica, pero has de plantearte sinceramente si quieres ejercer la profesión porque tu cuerpo te lo pide y no puedes vivir sin ello. Como cualquier profesión en esta vida, encuentras a personas que no tuvieron más remedio que formar parte de ella, las que lo hacen porque no encuentran otra cosa mejor y los que han vivido con y para ese propósito, principalmente la necesidad imperiosa de querer compartir las emociones y sentimientos que te transmite la música con los demás. Si ese Don sectario musical acabarás convirtiéndote en otro autómata pinchadiscos.

Los nuevos discjockeys que se unen al carro se piensan que con tener buena técnica y acceso a los temas más punteros o de moda ya tienen el oficio asegurado, ¡ni por asomo! Las motivaciones primigenias se olvidan con demasiada facilidad una vez ha pasado el tiempo, en cambio si son tus únicas motivaciones las tienes siempre presentes. Se han llegado a ver casos en foros de Internet donde un usuario preguntaba: “Quiero ser DJ, ¿qué tipo de música tengo que poner?” ¿Estamos locos? Otra agonía es la obsesión por las mezclas, ¡a mezclarlo todo se ha dicho! La mezcla recae principalmente en el estilo musical que pinches, no siempre es necesaria la mezcla constante entre temas según el estilo, lo importante es que fluya la sesión, no la técnica. La clave está en saber qué disco pinchar en el momento idóneo más que introducirlo con todo tipo de mezclas. Existen discjockeys de reputación internacional que no dominan la técnica de la mezcla a la perfección y se limitan a pinchar un disco tras otro, pero que saben perfectamente cual es el próximo tema a poner, dejando en un segundo plano la calidad de la mezcla, haciendo tan sorprendente la sesión que el público se olvida por un momento de la técnica o el descuadre si llega a darse el caso.

Si tu música aborrece o está mal escogida en el momento más inoportuno, ni la mejor técnica ni el mejor ritmo podrán salvar la sesión. La maestría por la mezcla debería enfocarse en el turntablismo y no en el dijing, optando a prestigiosos concursos de DMC. Cada cosa en su sitio, ya que, un discjockey no dura un minuto en un concurso de DMC ni tampoco un público aguanta más de una hora escuchando únicamente turntablism. Es cómo si un cocinero se centrara tanto en buscar los mejores utensilios e ingredientes que luego se olvidara de cocinar. Lo importante en el oficio es dar rienda suelta a la creatividad, crear tu propio estilo de mezcla, adecuado a tu ritmo y sesiones, además de aprender constantemente de los demás, como todo oficio. Cuando el DJ está realmente ante el público en la sala y comienza a interactuar con ellos a través de la música es cuando realmente comienza a acumular experiencia y creatividad, una labor de aprendizaje continuo durante toda la carrera del DJ.

Acerca de Callaway Khrono
Licensed on Communication Studies. I'm studying Social Networking. I'm working in IESE Business School of Barcelona on Audiovisual Services since 2009. I'm focusing in studies related with Audiovisual Communication, Design, Social Networks, Web 2.0 & 3.0, HTML5, Web Apps & Cloud Computing. I like movies, photography, animation, Internet, multimedia & the social networks.

Deja un comentario